Todos los productos son ignífugos, no inflamables y resistentes a la propagación de la llama.
Los caños de PVC, a diferencia de los de hierro, no se oxidan, mientras que las cajas fueron diseñadas para los módulos eléctricos modernos, con troqueles que se ajustan exactamente a los distintos tamaños de caño y tornillos de avance rápido que facilitan la instalación.
Los productos respetan las normativas actualizadas de la AEA (Asociación Electrotécnica Argentina) y responden a distintas Normas de Calidad IRAM; los caños anillados cuentan con el Sello de Calidad IRAM y seguridad eléctrica.
